Sistema de Compliance o de Cumplimiento Normativo

La buena gobernanza de nuestras empresas actualmente pasa por disponer, entre otros elementos, de eficaces marcos normativos internos que permitan orientar y transmitir una verdadera cultura de cumplimiento normativo a todos los integrantes de la organización, propiciando con ello, comportamientos responsables en una sociedad que demanda, cada vez en mayor medida, actuaciones empresariales con elevados contenidos éticos.

​Desde 2010,  nuestra legislación, en aras la  adaptación de normas comunitarias y estándares internacionales, viene realizando una serie de modificaciones legales que podemos centran  en la Ley 5/2010 donde, por primera vez, se hace referencia a los sistemas de cumplimiento normativo o programas de prevención de riesgos en ámbitos diferentes, culminando con la promulgación de la modificación del Código penal por ley 1/2105.

El espíritu que inspiran estas nuevas normativas, se sustenta sobre la base, de que las organizaciones, cuya meta es tener éxito, necesitan mantener una cultura de integridad y de cumplimiento, así como tomar en consideración las necesidades y expectativas de las partes interesadas, como oportunidad hacia el éxito sostenible.

El resultado de que una organización, cumpla con sus obligaciones, influye dentro de la actitud de las personas que trabajan dentro de ella, variando su comportamiento y en definitiva ello la hace sostenible.
Los procesos de gestión de finanzas, ( Tax fiscal ,ISO 19602) ,y  calidad ( ISO 9001), Gestión de riesgos Penales ( ISO  19600 y 1961 ) instituyen la calve de un sistema eficaz de gestión empresarial , que permite demostrar su compromiso de cumplir con la normativa vigente, así como con los estándares internacionales y de buen gobierno corporativo, realización de las mejores prácticas, ética, y expectativas para la comunidad en general.

Las organizaciones cada vez, están más concienciadas, de que cuando aplican sus mejores prácticas y valores obligatorios, asistidos de una gestión adecuada, pueden salvaguardar su integridad, de forma que así evitan o minimizan incumplimientos legales, elementos todos ellos clave para llevar una gestión diligente y responsable, reuniendo los estándares internacionales de reconocimiento.
Estos sistemas no especifican requisitos en concreto, sino que constituyen una guía de sistemas de gestión, adaptable al tamaño y circunstancia de cada organización en concreto, su nivel de madurez en el sistema de gestión  y la complejidad de sus actividades.

El control interno es un proceso integral, aplicado por la máxima autoridad, que proporciona la seguridad razonable para el logro de los objetivos institucionales y la protección de los recursos públicos. Constituyen componentes del control interno: el ambiente de control, la evaluación de riesgos, las actividades de control, los sistemas de información, comunicación y seguimiento, con el objetivo de cumplir el ordenamiento jurídico, técnico, administrativo, promover la eficiencia y eficacia de las operaciones de la entidad, así como para la adopción de las medidas necesarias para la corrección de las medidas de control.

En entidades u organismos del sector público y personas jurídicas de derecho privado que dispongan de recursos públicos para alcanzar su misión institucional, se deberá contribuir al cumplimiento de los siguientes objetivos:

• Promover la eficiencia, eficacia y economía de las operaciones bajo los principio de la ética y la transparencia
• Garantizar la confiabilidad, integridad y oportunidad de la información
• Cumplir con las disposiciones legales y normativa para entregar bienes y servicios públicos de calidad
• Proteger y conservar el patrimonio público contra pérdida, despilfarro, uso indebido, irregularidad o acto ilegal. El talento humano el  bien más valioso que posee cualquier institución por lo que debe ser tratado de forma que alcance su máximo rendimiento, siendo responsabilidad de la dirección encaminar hacia la satisfacción del trabajo, así como hacia el apego a la normativa y marco legal de las relaciones laborales, hoy día la administración del talento humano es una de las partes más importantes del control.

De esta forma llegamos a la tendencia actual de  ligar la valoración del riesgo a la obtención de la información sobre las situaciones de riesgo, a fin de estimar su probabilidad, y reflexionar de cómo pueden afectar a los objetivos, y de esta forma considerar el manejo del riesgo, ya sea evitando, reduciendo, compartiendo el mismo. A tal efecto disponemos de  los sistemas o Modelos de Prevención de Riesgos Penales, las Relativos al ámbito Penal, que deben adecuarse a los principios de la UNE ISO 19600 y 19601. Pero cada vez, el concepto se amplía a otras áreas de cumplimiento normativo, así, dentro del ámbito de las relaciones laborales, para asegurar la validez y estandarización de los programas de compliance laboral (Labour Compliance Programs) éstos deberán adecuarse a los principios y recomendaciones de las diferentes normas internacionales que existen, como la UNE-ISO 19600 (“Sistema de Gestión de Compliance”) o la UNE-ISO 31000 (“Gestión del Riesgo”), y configurarse como auténticos mecanismos de análisis y verificación del grado de cumplimiento normativo y gestión del riesgo legal corporativo.

Las principales áreas que deben abarcar los programas de compliance, dentro del ámbito penal, se extienden hoy día a las totalidad de preceptos comprendidos dentro del Art. 31 del C.Penal, y delitos conexos, así como a los relativos a condiciones de trabajo, tanto en territorio nacional como internacional; igualdad y no discriminación; nuevas tecnologías de la información y comunicación (TIC) ; protección de datos personales y propiedad intelectual; prevención de delitos en el ámbito laboral (Corporate Labour Compliance); prevención de riesgos laborales, seguridad y salud en el trabajo, Tax fiscal ,y  actuaciones en materia de responsabilidad social corporativa, entre otras.